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La sexta edición del Festival de Teatro de Rafaela -organizado por la Municipalidad de Rafaela, en co-gestión con el Instituto Nacional del Teatro y el Ministerio de Innovación y Cultura de la Provincia de Santa Fe- se llevó a cabo desde el miércoles 14 al domingo 18 de julio de 2010.

A lo largo de cinco días se exhibieron 17 espectáculos provenientes de Buenos Aires, Rosario, Córdoba, San Salvador de Jujuy y Rafaela.

El teatro local estuvo presente por tercer año consecutivo con el estreno de las dos obras seleccionadas a través del Concurso de Coproducciones FTR10, estimulando de este modo la producción de los grupos rafaelinos.

Se realizaron 33 funciones en 10 locaciones de la ciudad, siendo una de las apuestas más fuertes de esta edición, ya que se sumaron a las salas tradicionales -Centro Cultural La Máscara, Centro Cultural Municipal - Sala Sociedad Italiana, Cine Teatro Belgrano y Teatro Lasserre- diferentes espacios alternativos, como vecinales, plazas y el vestuario visitante del Club Atlético de Rafaela.

La presencia del Festival se ha extendido a 5 barrios de la ciudad, realizando funciones en las plazas de Barranquitas y Villa Rosas y en los salones vecinales de Martín Fierro, Mora y Pizzurno, todas con entrada libre y gratuita.

Entre los espectáculos seleccionados pudieron verse comedias, dramas, espectáculos de humor, unipersonales, musicales, teatro físico y circo.

Como todos los años, el Festival recibió la visita de destacados artistas y compañías nacionales. Entre ellos podemos mencionar a Rubén Szuchmacher, reconocido director y dramaturgo, director artístico del FIBA (Festival Internacional de Buenos Aires); el emblemático Grupo Laboratorio de Teatro "El Rayo Misterioso", fundado y dirigido en Rosario por Aldo El-Jatib; el excéntrico clown y luthier, Salvador Trapani; la desopilante actriz, escritora y directora Mónica Cabrera -invitada especial del FTR desde sus inicios, quien regresó a nuestra ciudad con su última creación-; el director y dramaturgo Gonzalo Marull, uno de los más destacados del teatro cordobés de los últimos años y El bachín teatro, compañía con una fuerte impronta histórica y política.

Este año, para el Lanzamiento del Festival, se brindó una conferencia de prensa diferente en la que, además de presentarse la programación, se pudo disfrutar de las improvisaciones de actores locales, que interpretaron distintos personajes de recientes producciones rafaelinas. Se realizó el 23 de Junio en el Centro Cultural Municipal Sala Sociedad Italiana, con la presencia de artistas rafaelinos, autoridades, equipo organizativo y medios de comunicación.

Esta nueva edición del Festival organizó además un atrayente cronograma de Seminarios y Actividades Especiales, todos ellos con entrada libre y gratuita.

Se dictaron tres seminarios que contaron con numerosos inscriptos colmando el cupo total de cada uno de los talleres.

Dirigido a actores, dramaturgos, directores y estudiantes de teatro, se desarrolló el seminario Hacia un teatro épico, dictado por Manuel Santos Iñurrieta, director artístico del grupo "El bachín teatro", de Buenos Aires, con 25 inscriptos.

Por otra parte, se llevó a cabo una charla-taller denominada ¿Cómo formar espectadores?, a cargo de Sonia Jaroslavsky y Ana Durán, responsables del Programa Formación de Espectadores de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, con el objeto de brindar a cerca de 40 docentes de enseñanza media vinculados a áreas artísticas como a alumnos avanzados de carreras afines, las herramientas necesarias para incentivar a sus alumnos a convertirse en espectadores críticos y permanentes de las artes escénicas.

También, se repitió la experiencia realizada el año pasado con los integrantes del Grupo Urraka! en el sector norte de nuestra ciudad. Este año se concretó en el sector Sur, en el Salón de Usos Múltiples del Barrio 2 de Abril, donde más de 50 niños y jóvenes trabajaron desde el miércoles 14 hasta el sábado 17, en jornadas de 2 horas. Luego, como cierre de la actividad, se presentó una muestra final donde actuaron todos los integrantes del taller. Esta muestra había sido programada para realizarse en la Plaza 25 de Mayo, pero debió ser reprogramada en el Centro Cultural Municipal Sala Sociedad Italiana por el mal tiempo.

En el marco de las actividades especiales, se realizó una Charla abierta con Rubén Szuchmacher, en la que el reconocido director de teatro habló de su carrera, de su experiencia y de su extensa trayectoria. Participaron teatristas locales, artistas invitados y público en general, quienes tuvieron la inolvidable oportunidad de interrogar a quien es uno de los directores más importantes del territorio nacional.

También se presentó el libro Historia de una escena en construcción: los veinte años del grupo Punto T/La Máscara, de María Eugenia Meyer. Dicho libro retoma y expande el recorrido de este grupo paradigmático de la escena rafaelina, reflejado en el libro "25 años de teatro rafaelino: tradiciones, rupturas y continuidades en la escena local" de María Eugenia Meyer y María Cecilia Tonón. En la expansión y profundización de este recorrido, la Prof. Meyer presenta todas las obras estrenadas desde 1989 -año de creación del Grupo Punto T- e incluye aquellos espectáculos a cargo del Grupo La Máscara.

Además se llevó a cabo una Retrospectiva de Teatro Rafaelino, donde se proyectaron en video obras de teatro de los grupos históricos locales: Centro Ciudad de Rafaela, Alas, Punto T/La Máscara y Caldo de cultivo (lamentablemente Abutardas no posee filmaciones de sus trabajos), con la intención de ofrecer al público la posibilidad de conocer o de rever algunas de las obras teatrales más significativas del teatro local de los últimos años. La retrospectiva se realizó en la Biblioteca Sarmiento del Centro Empleados de Comercio.

Como todos los años, se desarrollaron las habituales Mesas de devoluciones con la participación del Círculo de Críticos de las Artes Escénicas de la Argentina y de periodistas especializados de distintos medios del país. Este punto de encuentro se constituyó una instancia de aprendizaje y crecimiento para los artistas, a través de las devoluciones que brindaron tanto los críticos teatrales como el público de las obras.